Natulim es un detergente deshidratado que se pone en la lavadora con la ropa y, una vez entra en contacto con el agua, se deshace y sustituye a los productos tradicionales. Dicho así, podría parecer una innovación más del sector de la limpieza. Pero tiene unas peculiaridades que lo convierten en una alternativa sostenible de primera magnitud. Nos lo explica Lluís Montull, ingeniero y fundador del proyecto, en un nuevo episodio de Personas.

“El detergente tradicional tiene un 90% de agua y solo el 10% son ingredientes con detergente. Y nos dimos cuenta de que esta agua nos la podíamos ahorrar. Con solamente una tira conseguíamos el mismo efecto”, detalla Montull. Y añade: “Tener que procesar toda esta agua, al final, nos hace gastar mucho más en combustible y mucho más CO₂”. Las tiras deshidratadas, en cambio, ahorran todo este proceso de producción.

Además del ahorro de agua, todavía hay otro motivo que hace mucho más sostenible la propuesta de Natulim. Toda esta agua que hay en los detergentes tradicionales se tiene que envasar en recipientes de plástico, un material que no se recicla completamente. “Hay que tener presente que únicamente el 20% del plástico de los contenedores amarillos se recicla. El resto acaba en vertederos”, señala Montull. Por el contrario, las tiras deshidratadas de detergente evitan todo este gasto de plásticos, porque se envasan en cartón biodegradable.

Pero Natulim, que nació en plena pandemia, no solo es útil para reciclar mejor, sino que sus dos creadores, David Weiss y Lluís Montull también se han preocupado de que todos los ingredientes que contiene su iniciativa sean buenos para el medio ambiente, la salud y la ropa. “Analizamos muchos suavizantes y nos dimos cuenta de que contenían muchos materiales que son malos para el planeta, incluso malos para la piel y la ropa”, argumenta Montull.

Como curiosidad, Montull explica que la espuma que los detergentes tradicionales sueltan no sirve para nada en concreto, sino que se añade al producto porque el consumidor lo asocia con el jabón en pastilla de toda la vida, que sí hace espuma cuando se frota con la ropa. “Además, algunos suavizantes, cuando se secan sobre la ropa, forman una película que puede tapar los poros de la tela y esto puede provocar que, aunque la lavemos a menudo, huela a sudor”, añade.

Por eso, lo que propone Natulim son estas tiras deshidratadas, que se pueden comprar por suscripción y recibirlas mensualmente, bimensualmente o trimestralmente, según el número de personas del núcleo familiar. Las tiras son veganas, libres de fosfatos, parabenos, colorantes y dioxanos, aptos para pieles sensibles, para ropa blanca o de color y para cualquier tipo de lavadora. Montull asegura que la sociedad catalana está preparada para este cambio.

Si quieres lavar la ropa sin ensuciar el planeta, 11Onze Recomienda Natulim.